sábado, 7 de junho de 2014



"El amor nos aísla. Que oscuridad. 
No sé si nací para compartirme,
o me comparto para aislarme.

Nada ni nadie ordena ni delimita mis pasos. Puedo andar días sin cansancio ni rumbo. Lo hago; no encuentro motivo para detenerme. Me gustaría tenerlo, sin embargo. Nadie lleva mi mano ni me abraza ni me añora ni me exige estar. Me gustaría tanto. El amor y el asco más irracional a quien lo hiciera. Asco, odio y miedo en un grito oscuro: te encontré. Un alivio mudo. Pero no, no, no lo vemos. La lucidez es momentánea y pasajera. ¿Entiendes? Vuelve la ceguera. Lárgate, te encontré porque no encuentro nunca; sólo espero y el deseo hace el resto. Esta farsa ha sido preciosa, sí. Pero nada. Aunque confío en tus pies tras mi sombra. Esto no está bien. Suerte que ya has huido. Hoy te echo de menos.
Ay, esta libertad puta y maravillosa."

silvia grav

Nenhum comentário:

Postar um comentário